La demanda de materias primas por parte de China tuvo un efecto directo sobre el precio de las mismas, aumentando el valor exportado de los principales productos (cobre, hierro, zinc, soja, petróleo, carne, entre otros). Por otro lado, la mayor oferta de manufacturas, especialmente maquinarias y equipos y bienes intermedios, determinó el aumento de las importaciones de este tipo de productos desde China. Adicionalmente, el creciente peso de China en las exportaciones mundiales ha significado una mayor competencia de productos latinoamericanos con productos chinos en terceros mercados, especialmente en los Estados Unidos y la propia región.
El aumento del precio de las materias primas en la primera década del siglo XXI, gracias a la gran demanda China, y la apreciación de las monedas latinas incentivaron a que se deteriorara más la industria latina. Sin embargo, el cambio de China hacia su economía interna parece una oportunidad para América Latina de exportarle productos que no sean solo commodities, sino porductos con mayor valor agregado, y recuperar parte de la industria perdida en las últimas decadas.